El Correo.-El ministro de Presidencia insta a Sánchez García a que retire sus palabras «inaceptables», pero éste se niega.
«Usted es un propagandista que deja en un párvulo alumno al doctor (Joseph) Goebbels. Está al servicio de un sujeto que, manteniendo el símil, podemos decir que es como el Führer». El diputado de Vox José María Sánchez García ha desplegado este miércoles en la tribuna del Congreso una ristra de altisonantes comparaciones que involucran al ministro de Presidencia, Félix Bolaños, y al propio presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, respectivamente. El primero de ellos, al que interpelaba durante la sesión, le ha reclamado que retirara sus palabras, pero el representante de la formación de extrema derecha se ha negado.
El pleno debatía en ese momento una interpelación urgente de Sánchez García a Bolaños, a quien preguntaba por las medidas que va a adoptar su Ministerio para «evitar que el Gobierno de España siga dinamitando la democracia». El diputado de Vox le ha recriminado el montante de las partidas presupuestarias destinadas a «apoyo informativo», un término que considera un mero eufemismo para ocultar sus prácticas «propagandísticas». «Ya le vimos el plumero con ocasión de la exhumación-profanación (en referencia a la reubicación del cadáver de Franco). ¡Renuncie a Satanás y a sus pompas!», le ha emplazado.
El discurso de Sánchez García ha tocado techo cuando ha situado a Bolaños al nivel de Goebbels, ministro durante el Tercer Reich y máximo artífice de la propaganda nazi, como un pupilo del dictador Adolf Hitler, a quien en esta comparación identifica con Sánchez. Sus palabras han generado murmullos y quejas entre representantes de la bancada socialista, mientras sus compañeros de Vox aplaudían. La presidenta accidental del Congreso, Ana Pastor (PP) –en ausencia de la presidenta, Meritxell Batet, y el vicepresidente primero, Alfonso Rodríguez Gómez de Celis, ambos del PSOE– no ha intervenido en ningún momento.
Nueva polémica
En la réplica, Bolaños ha iniciado su turno reclamando a Sánchez García que retirara sus palabras por las «comparaciones inaceptables» que incluían. «Pido solemnemente que se retiren del acta y le pido que se disculpe porque la representación de la soberanía nacional en este hemiciclo no tienen por qué soportar unos insultos tan alejados de la realidad como los que acaba de proferir», ha planteado el ministro de Presidencia. «No tenemos por qué aceptar los insultos de la extrema derecha en esta Cámara», ha insistido el hombre fuerte del Gobierno de Sánchez entre la ovación de diputados socialistas puestos en pie. El diputado de Vox, desde su escaño, se negaba a rectificar.
Se da la circunstancia de que no es la primera polémica que protagoniza este diputado de la formación de Santiago Abascal. El pasado septiembre se tuvo que detener un pleno durante más de 10 minutos por su negativa a acatar la expulsión del hemiciclo que había decretado el presidente accidental, Gómez de Celis. La decisión se produjo después de que Sánchez García llamara «bruja» a la representante socialista Laura Berja en el contexto de un debate para incluir como delito en el Código Penal el hostigamiento a mujeres que desean abortar. Tras varios intentos para que retirara su insulto, acabó por retractarse con una peculiar fórmula. «Retiro que le he llamado bruja», dijo.
