Un grupo de entre 30 y 40 personas han increpado a los simpatizantes del partido, instalados junto a la estación de Renfe y el Metro
F. JAVIER BARROSO. EL PAÍS.- La Policía Municipal ha detenido en la tarde de este jueves a una mujer por un supuesto delito de «odio a la bandera» en un ataque a una mesa de Vox en el distrito de Vallecas. Los seguidores de este partido habían instalado una pequeña carpa delante de la estación de metro de Sierra de Guadalupe. En un momento, un grupo de entre 30 y 40 personas se ha acercado a ellos y les han gritado “fuera fascistas de nuestro barrio”. Los simpatizantes del partido han agotado el tiempo que tenían para permanecer en el lugar (las siete de la tarde) y después se han marchado.
Este delito, tipificado en el artículo 543 del Código Penal, está dentro de los llamados delitos de ultraje a España o a sus símbolos y puede acarrear penas de 7 a 12 meses de prisión. El mismo castigo que enfrentó el humorista Daniel Mateo por sonarse los mocos en la bandera de España en una broma de televisión, y que el juez terminó archivando.
Los hechos han ocurrido alrededor de las seis y media de la tarde, cuando acababan de montar el puesto y se había retirado la vigilancia policial. Una de las seguidoras de Vox, de nombre Patricia, ha sido la que ha sufrido el robo de un teléfono móvil que se lo han arrebatado de la mano tras darle un golpe. “Estaba tranquilamente ejerciendo nuestro derecho a la libertad de exponer las ideas de un partido y de repente han empezado a insultarnos y amenazarnos de muerte. Nos han empezado a empujar y han intentado arrancarnos la bandera de España”, ha explicado la mujer.
La policía ha enviado a ese lugar gran parte de las unidades que estaban de servicio y ha tenido que separar a los contendientes. Los ha puesto al lado contrario de la acera mientras los atacantes no paraban de gritar “fuera fascistas” y “volver al barrio de Salamanca”. La víctima del robo ha dado la descripción de su atacante y los agentes le han detenido en las inmediaciones.
El dispositivo policial se ha mantenido durante mucho tiempo hasta que los seguidores de Vox han retirado la carpa y, bajo la presencia policial, se han marchado de la zona. “¿Necesitáis ayuda?”, han empezado a vitorear los supuestos atacantes mientras proferían insultos y palabras malsonantes a los integrantes de Vox. La detenida ha sido conducida a dependencias policiales como supuesta autora de un robo con violencia e intimidación. Al lugar también han acudido agentes de la Unidad de Intervención Policial (UIP), los antidisturbios. Cuando han llegado la situación estaba prácticamente controlada y no se ha requerido su presencia.
