Albiol admite que usó expresiones “inadecuadas” sobre los gitanos rumanos

| 20 noviembre, 2013

El alcalde de Badalona declara en el juicio que no quiso «menospreciar» al colectivo al repartir los folletos electorales

Xavier-Garcia-Albiol-Badalona-ACN_ARAIMA20110611_0070_10 JESÚS GARCÍA. EL PAÍS.- El alcalde de Badalona, Xavier Garcia Albiol, ha admitido que utilizó expresiones «inapropiadas» para referirse a los gitanos rumanos, pero ha matizado que en ningún caso pretendió «menospreciar» al colectivo. Albiol se ha sentado hoy en el banquillo de los acusados por incitación al odio racial. Los hechos datan de abril de 2010, cuando el PP de Badalona difundió folletos en los que vinculaba a los gitanos rumanos con la delincuencia. Además, cargó contra el colectivo en declaraciones a diversos medios de comunicación.

Albiol ha defendido que los folletos xenófobos son «un material de comunicación política» que únicamente pretendía «poner de manifiesto una serie de problemas en algunos barrios de Badalona». El alcalde, que entonces era jefe de la oposición, ha afirmado que solo se repartieron un millar de los 15.000 dípticos que se habían editado. Los repartió en el mercadillo del barrio se La Salut junto a la presidenta del PP catalán, Alicia Sánchez-Camacho. Pero, tras ser acusado de racismo, decidió suspender el reparto, ha afirmado en un tenso interrogatorio del fiscal de delitos de odio de Barcelona, Miguel Ángel Aguilar. «El tema se había desenfocado y se centró en la xenofobia cuando ésta no era la intención», ha afirmado el alcalde.

Los folletos llevaron a Albiol a un «tour» ante los medios de comunicación: «Cuando se atiende a 40 medios, en algún momento se puede decir una palabra inadecuada». Albiol ha admitido que son suyas casi todas las manifestaciones polémicas. Por ejemplo, cuando dijo que el colectivo había llegado a la ciudad para «delinquir y robar». El alcalde, sin embargo, no ha reconocido que llamara «plaga» a los gitanos rumanos en un debate de Canal Català.

El fiscal, que pide un año de prisión por un delito de provocación a la discriminación, ha negado que las expresiones de Albiol fueran un simple «desliz», porque «las repitió» durante varios días y a distintos medios. Arropado en la sala de vistas por dirigentes de su partido (entre otros, Sánchez- Camacho y Alberto Fernández Díaz), Albiol ha pedido que se valoren las entrevistas de aquellas jornadas «en su globalidad» y ha subrayado su «compromiso con las libertades y la igualdad».

El juez ha intervenido en diversas ocasiones para interrumpir al fiscal y al abogado de la acusación popular, que ejerce la ONG SOS Racismo: «Esto es un juicio por un delito, no un debate político».

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