EFE. LA VANGUARDIA.- Una colación del partido liberal Open VLD y de la izquierda del Samen, con apoyo de los nacionalistas flamencos de la N-VA, impedirán que la ultraderecha gobierne en Ninove, localidad de Flandes (norte) de 38.000 habitantes donde fue la fuerza más votada en las elecciones municipales de octubre.
El partido Forza Ninove, marca local de la ultraderecha flamenca del Vlaams Belang, logró en ese pueblo del centro del país, a 25 kilómetros al este de Bruselas, el 40 % de los votos en los comicios de octubre, que le aportaron 15 de los 33 escaños del consistorio y le supuso un gran éxito electoral.
Sin embargo, la extrema derecha no podrá formar gobierno en ese municipio ya que, según anunciaron hoy las formaciones, los nueve escaños de Open Vld más los siete de Samen, a los que se sumaría al menos un voto de los dos que tiene la N-VA, otorgarían la mayoría absoluta (17 escaños) a la coalición alternativa.
«Reconocemos que un cierto número de habitantes se sentirán decepcionados e incluso descontentos (…), no podemos contentar a todo el mundo. Pero permitimos al menos que nos concedan el beneficio de la duda», indicó la formación gobernante en un comunicado en el que recordó que el acuerdo representa a «la mitad de los electores».
El líder de la ultraderecha en el municipio, que aspira a conseguir la mayoría absoluta en la próxima convocatoria municipal dentro de seis años, Guy D’haeseleer, señaló a través de la red social Facebook que la coalición supone «una bofetada en la cara de gran parte de los habitantes de Ninove, y de los electores flamencos en particular».
Más allá del resultado electoral, la victoria de la ultraderecha en esa pequeña localidad generó polémica en la noche del escrutinio pues los diarios belgas mostraron fotografías de cómo algunos de sus seguidores celebraron el triunfo haciendo el saludo nazi en las calles.
