Acusan a un joven con discapacidad de torturar animales y un grupo de vecinos casi le quema la casa: era todo una broma

La Vanguardia.- A Matías Fulco (28), si se lo cruzaban por la calle, lo iban a matar. Sin tapujos lo afirmaban en cámara los vecinos que se turnaban para salir en vivo en el canal de televisión que cubría la historia. Un centenar de personas se agolpaban en la puerta de su casa para insultarlo, mientras se pasaban por WhatsApp con indignación las publicaciones en las que se compartían su nombre y sus datos personales. Algunos manifestantes lanzaban piedras a la persiana, otros se peleaban con la policía, que se ponía de escudo. Todos estaban indignados con lo que Matías posteaba en Instagram: videos de tortura animal en los que los compartía: amenazaba con ahorcar gatos o se jactaba de violar perritos.

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