Multa a Hazte Oír por vejar al colectivo LGTBI, que ‘objetará’ para no pagar

, , | 7 diciembre, 2017

JAVIER GARCÍA MARTÍN. MADRID DIARIO.- La Consejería de Políticas Sociales y Familia ha propuesto multar con 1.500 euros a la organización ultraconservadora Hazte Oír por enviar folletos «vejatorios con las personas LGTBI» a centenares de colegios en 2016. Estos panfletos criticaban el «adoctrinamiento» que, a su juicio, comportan leyes contra la lgtbifobia como la madrileña. La Comunidad entiende que estos panfletos -que ilustraban a niños haciendo el saludo fascista delante de una bandera arcoíris- introducen un «ideario discriminatorio» más allá de la mera crítica a la norma.

Enviar a más de 16.000 colegios de todo el país un panfleto criticando la «imposición de la diversidad sexual» con «leyes de adoctrinamiento» y aderezarlo con un montaje de dos niños haciendo el saludo fascista delante de una bandera arcoíris cuesta, en laComunidad de Madrid1.500 euros de multa. La Consejería de Políticas Sociales y Familia ha solicitado la imposición de una sanción económica a la organización ultraconservadora Hazte Oír por vulnerar la Ley de Protección Integral contra la LGTBifobia y la Discriminación por Razón de Orientación e Identidad Sexual con esta campaña de difusión puesta en marcha en noviembre de 2016.

En concreto, según un expediente de la Secretaría General Técnica de la Consejería al que ha tenido acceso Madridiario, la Comunidad considera probado que el folleto titulado‘¿Sabes lo que quieren enseñarle a tu hijo en el colegio? Las leyes de adoctrinamiento sexual’ y remitido a los centros educativos acompañado de una carta contenía expresiones «vejatorias hacia las personas LGTBI», lo que comporta unainfracción administrativa leve. La asociación Arcópoli ha celebrado esta «gran noticia».

En realidad, lo que hace la Comunidad es culminar el procedimiento sancionador incoado a esta plataforma desde finales del pasado año. El origen de todo está en la Fiscalía, que archivó una denuncia de Comisiones Obreras sobre esta polémica, pero pidió a la Consejería que la estudiara como «posible comisión de una infracción administrativa».

La Comunidad ve «un ideario discriminatorio»

El expediente firmado por la instructora de la Secretaría General Técnica sostiene que «la intención» del folleto enviado por Hazte Oír a las aulas «es claramente vejatoria» y «está lleno de conceptos que desbordan la acepción de mera expresión y se introducen de lleno en un ideario discriminatorio«.

En este sentido, señala que «las continuas apelaciones a la ‘familia universal natural’, a la desorientación de los niños sometidos a una pretendida imposición de diversidad sexual o el propio término ‘adoctrinamiento’, es evidente que provocan ofensa». «Sirva simplemente de ejemplo el sofisma que supone afirmar que las leyes en materia LGTBI tratan de ‘privilegiar el adoctrinamiento sexual'», tal y como cita la instructora. «No puede considerarse la remisión del folleto (…) como mera crítica a la legislación«, añade.

El documento enviado a los centros criticaba que Comunidades como la madrileña «se adhieran a la corriente ideológica defendida por los ‘lobbies’ del feminismo radical y LGTBI» y que «privilegien con dinero público el adoctrinamiento sexual» con la supuesta consecuencia de la «destrucción de la familia universal».

Así, contrapone los «principios inmutables y universales» frente a la instauración «por decreto» de «la normalidad de lo presumiblemente anómalo» y rechaza el «carácter promocional de la homosexualidad» que, a su juicio, conllevan estas normativas.

Objeción de conciencia

Aunque la sanción no sea realmente elevada ni pretenda ser ejemplarizante (hay multas de hasta 45.000 euros en la norma), Hazte Oír ya ha dicho que no piensa pagar. La misma entidad que a comienzos de año consiguió un tremendo eco mediático al poner en circulación un autobús tránsfobo argumenta que, como objetores de conciencia de la norma, también lo son de sus sanciones.

“A partir de este momento nos declaramos públicamente objetores de la ley LGTBI de la Comunidad de Madrid”, han señalado los responsables de la entidad en un mensaje enviado a sus seguidores. «Nos negamos a pagar la multa que esta ley intolerante nos impone”, añaden.

Cabe recordar, no obstante, que la normativa sancionadora sobre la que se apoya la ley no contempla la objeción de conciencia.

Ahora, la organización puede presentar alegaciones y podría aminorar el coste de la multa si reconociese su «responsabilidad» sobre los hechos.

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