La ultraderecha alemana pierde apoyos en medio de escándalos internos

| 22 febrero, 2017

Alternativa para Alemania se desploma en las encuestas a medida que la crisis de los refugiados pierde relevancia

CARMEN VALERO. EL MUNDO.- La formación populista de derechas Alternativa para Alemania (AfD) se desploma en las encuestas a medida que la crisis de los refugiados pierde relevancia y a diferencia de sus «aliados» en Francia y Holanda, el Frente Nacional de Marine Le Pen y el Partido de La Libertad de Geert Wilders, que concurren próximamente a las urnas con expectativas de victoria. En un sondeo publicado este miércoles por el instituto demoscópico Forsa, la AfD obtendría un 8% de apoyos si hubiera elecciones el próximo domingo, la peor marca obtenida por el partido los últimos siete meses, cuando rondaba el 12% en intención de voto.

Para el jefe de Forsa, Manfred Güller, la caída de AfD se debe fundamentalmente a que la crisis de los refugiados, el principal nutriente de esa formación, ha pasado, pero también a los recelos que suscita en buena parte del electorado la presidencia de Donald Trump. «No hay motivos para la celebración. La presidencia de Trump está resultando caótica y hace presagiar nuevas crisis en el mundo» ha explicado Güller y ha añadido que muchos votantes potenciales del AfD han regresado a partidos tradicionales que generan más confianza como la CDU y sobre todo a los socialdemócratas del SPD.

La AfD se mantendría pese al desinfle como tercera fuerza política en Alemania, pero muy a la zaga de la coalición formada por la formada por la Unión Cristianodemócrata (CDU) y la Unión Socialcristiana bávara (CSU), que con Angela Merkel a la cabeza, lidera las encuestas con un 34% de apoyos. La segunda posición es para el SPD. El sondeo realizado por Forsa para el semanario ‘Stern’ y la primera cadena de televisión pública ARD, otorga al SPD un 31 por ciento, una progresión de casi cuatro puntos que los analistas achacan al tirón que supuso la elección del ex presidente del Parlamento Europeo, Martin Schulz, como candidato. Hay indicios sin embargo de que el efecto Schulz podría no ser sostenible.

A sólo un punto de la AfD, con un 7%, la encuesta de Forsa sitúa a Los Verdes y a La Izquierda, mientras que los liberales del FPD volverían al Parlamento con un 6% del escrutinio, un punto por encima del listón del 5% marcado por la Ley Electoral. El gran perdedor por el momento en las encuestas de opinión es por tanto la populista AfD que co-preside la controvertida Frauke Petry, a quien este lunes se ha visto encabezando una delegación de su partido en Moscú. La AfD, como otros partidos populistas de derecha que se abren paso en la Unión Europea no oculta su fascinación por la Rusia de Vladimir Putin y los contactos para una «cooperación política» con el Kremlin son frecuentes .

La AfD aboga en su programa electoral incluso por el levantamiento de las sanciones y algunos de sus dirigentes, entre ellos el vicepresidente Alexander Gauland, son ambiguos respecto a la crisis en Ucrania. En Moscú, Petry se ha entrevistado, entre otros, con el presiente de la Cámara baja, Vlatscheslav Volodin; el presidente de la comisión de Exteriores de la Duma, Leonid Sluzkij, y, como ya hiciera Marine Le Pen en su visitas a Rusia, con el jefe del grupo parlamentario del partido Liberal-democrático, el nacionalista Vladimir Schirinovskij.

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