ÁLEX SERRANO. LEVANTE-EMV.- Mientras en Berlín el FC Barcelona alzaba al cielo la copa de la Liga de Campeones un grupo de jóvenes jugaba en Valencia un partido mucho más importante. Al menos para ellos lo era. Y no por el trofeo, ni por las primas ni la repercusión mediática, sino porque el derrotado iba a ser la intolerancia y el racismo. El Movimiento contra la Intolerancia de Valencia, a través del programa de barrios Russafa Interga la Diversidad, organizó en el IES Malilla el primer torneo de fútbol sala «Por la diversidad cultural». En él participaron asociaciones de inmigrantes y clubes deportivos de la ciudad.
Los partidos, de 20 minutos cada uno, comenzaron a las 17 horas y se prolongaron hasta las 21.30. Participaron equipos de la Asociación de Camerunenses en Valencia, de l’Escola de Formació per al Treball La Punta de Natzaret, la Asociación de Senegaleses Teranga Bi, el FC contra la Intolerancia y los coorganizadores, el Malilla Fútbol Sala. El ganador era lo de menos, pues el verdadero rival no era el equipo contrario, sino el racismo y la intolerancia. «El objetivo de estos encuentros era crear espacios de convivencia, integración y cohesió nsocial en estos barrios utilizando el deporte como nexo de unión», explicaron fuentes de la organización.
«Este tipo de prácticas deportivas fomentan la convivencia e integración además de una vida sana entre los más jóvenes», indicó Ángel Galán, coordinador de Movimiento contra la Intolerancia en Valencia. «Pretendemos poner de manifiesto la gran riqueza social y cultural con la que contamos en la ciudad de Valencia y especialmente, en los barrios vecinos de Russafa y Malilla», señaló: «Este torneo representa un ejemplo de convivencia entre personas de distintos orígenes y nacionalidades donde lo más importante es disfrutar del deporte y demostrar que todos juntos podemos combatir el racismo y la intolerancia».
Los participantes recibieon una camiseta de conmemoración del evento además de una medalla por participar. La acción está integrada dentro del programa de prevención de racismo y xenofobia y atención para la integración y la convivencia, Russafa Integra la Diversidad, iniciado en este año y subvencionado por el Ministerio de Empleo y Seguridad Social y el Fondo de Asilo, Migración e Integración de la UE.
