UNITED PRESS INTERNATIONAL.- Luego que el Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (Movilh) denunciara el domingo pasado que el asesinato del joven Arturo Lomboi fue motivado por la homofobia de su victimario, la Fundación Iguales repudió el hecho e instó a las autoridades a hacerse cargo.
El presidente de Iguales, Luis Larraín, condenó el hecho y reprobó que «¿Cómo va a cesar la violencia contra los homosexuales si hay planes de afectividad y sexualidad aprobados por el Ministerio de Educación que enseñan que la homosexualidad es una enfermedad, algo que está descartado por el consenso científico desde los años setenta?».
«La violencia y la discriminación seguirán existiendo mientras no se cambien los currículos escolares y no se capacite a los funcionarios públicos, que muchas veces tienen un total desconocimiento del tema de la diversidad sexual», añadió.
Asimismo, se refirió a un «cierre doloroso de año», considerando el juicio de Zamudio y que Wladimir Sepúlveda continúa en estado vegetal luego de una golpiza homofóbica en San Francisco de Mostazal.
Por ello, Larraín llamó a las autoridades y parlamentarios a que «casos como el de Daniel Zamudio, Wladimir Sepúlveda y ahora Arturo Lomboi seguirán ocurriendo en Chile mientras el Estado no se haga cargo del tema de la discriminación con políticas públicas eficientes».
«La Ley Antidiscriminación es un avance político pero no crea un registro de este tipo de casos ni modifica la institucionalidad estatal, que hoy en día simplemente no aborda el tema», resaltó.
